ENERO. DIA
IV,
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de un
Monasterio
vecino , que persuadido de su resolucion
y
de sus lágrimas,, le· recibió entre los Monges..
,
. Apenas
se
vió .SimeQn en la compañia de aquellos fer–
vorosos Religiosos, quando
a
todos los excedió en ayunos,
en vigilias
y
en todo genero de austeridades, repartien–
do entre los· pobres el poco pan y legumbres que le da–
ban ·
a
él ,
y
pasando muchas veces
de un
D0mingo
a
otro·
sin comer bocado. ·
, Ingenioso ya
en
m~acerar
su delicado
~uerpo.,
se
apre–
to tan estrechamente
a
la
cintura una cuerda de palma,
que introduciendoselt! en la carne
al
cabo de diez días , el
mal olor que despedía la .llaga podrida, descubrió aquel
nuevo genero, de penitencia, .con espanto
y
con horror de
quantos fueron _testigos de
ella. No
se
le
pudo cortar la
cu~rda
sitl
~randes
ni terribles
~olores
;
y
la llaga tardó
en curarse dos
me.~es
, con tanto asombro de los Monges,
que pidieron, al Abad despidiese aquel mancebo, cuyos
exemplos los confundian , si.n. hallarse con fuerzas para
imitarlos• .
Reti~ós~
Simeon
a
otro *sierto que no
estab~·
di~tante
; y
eri~o~t.i;ando
en él un pozo seco , le esc0gió
por celda:
La
noche siguiente vió el Abad eñ sueños
a
mucho~
hombres vestidos de blanco gue cercaban el Mo=–
nasterio,
y
pedían con:amenazas al Santo Simeon,
a
quien
ta_n indignamen!e
h~b_ia- echa<;io
del Convento. Lyego
que
despertó .Heliodorº '· enyió
,loS;,~Onges
a
buscarle p9r to,..
dos·
lo~ . ~~siei:;tos
·
~ci.nos
·, ,
m<Jn9~n,d9les ~ue
:le .
trax~sen
al sievvo
ele
Diós;
~ le~ co~tÓ ¡J11U9ho , tr~J::>ajo
rieducirle
a
que dexase su querido pozo, terruendo siempre que no le
habían de permitir hacer
un~
vida tan. austéra
y
tan pe–
nitente como deseaba.. · · , - -
:
•, ..
'
te
..
· Tres años estuvo S1meonr en el Monast-erio -;
1
,pero
no
pudiendo·
sufdr ·,l~
9istinci9n y
er
réspeto ' con
qu~
le
t,ra–
taban; obtµvo •.en,
fiq
licencia para
rt:tirars~
a
otra sole–
dad mas-.
esc~ndid~.
Aquí estuvo ·otros tres años como se–
p,u
~t~do. ~1!~:.u!l-.ª cue~~ arr~inada .cerc~
de Telanisa, ex–
puesto
~
·todos los .ngores de los ,temp<?rales.
-
Aqui fue , donde.,
4~~e.Osq
1
pe
_im\tar
~flS
perfectamen·
te
el ayuno del Sa.lva4or;·c{el mu.ndo, pasó
,ur:ia
Quaresma
~ntera
sin
probar bocado.
~ino. .
a
verle un Sacerdote el
dia de Pasqua ,
y
hallandofe
c~si
al
e,spirar , le dió
la Sa–
grada
Comunion, con
.cuyo
divinoC_f!l,ime!1to
.recobró lue-
2
go