AÑO
CHRISTIANO.
felíces fueron los que no se aprovecharon de · sus- luces!
}:,a misma infelicidad padecen hoy los que resisten
a
la
grácia.
· ·· ·
.:
Dios habla , Pios nos llama. Ilustraciones interiqres,
inspiraciones secretas ,-meditaciones eficáées, libros espi- .
rituales , el1fermedades , aecidentes ; de todo
se
sirve
Dios
para · hacernos entrar. en el camino del Cielo par-a
convertirnos~
Tienense los ojos abiertos, admiranse, por
decirlo asi', estos sagrados fenómenos; pt:ro en medio de
. eso' ,se cierran los óidos
a
la voz de Dios.
·Raras· son · las fiestas grandes , raras las entradas de
año nuevo en que no hayamos descubierto .alguna nue–
va estrella, en que no hayamos visto alguna nueva luz.
Conócese ·, confiésase,
crée~e;
está la razon plenamente
convencida ·de que esi grande el atraso que se padece,
que falta todavía largo camino que andar; que se h:J,n
pasado años,
y
·ínas años sin haber adrj_antado nada..
E~ta confesion,
y
este conocimiento estéril es el único fru.::.
to que produce esta gracia. Y sin embargo esa luz no
brilló precisamente para alumbraF
a
los ojos; el fin prin–
tipal de su · resplandor fue para hacer impresion
~n
los
corazones. Era menester romper desde luego esta incH–
nacion, esos lazos; era menester ponerse al.phnto e.Q. ca–
mino ; era. menester seguir otra nueva senda con el
af.íonuevo. Pero nada menos que eso. Conocense los
des~a
rninos ' reprendese cada uno
a
sí mismo sus desordenes;
é:onfiesase -que todavía· no se ha comenzado
a
servir
~
Dios de véras; se tiene
a
la vista la sepultura., caminase
a
largas jornadas
a
la
muerte.
y
~n
medio,de eso los lazos'
subsisten., las pasiones echan mas hondas raíces, los pe–
cados se multiplican, sufocanse las gr:acias.,
y
aquel pobre
corazon se endurece. Pregunto·: _no ·es esto lo que
yo
estoy experimentando en mí
mismo~
·
_
Mi Dios, qué remordimientos! qué dolor! No permi–
taís, Señor, que se apaguen esas 'divinas luces; voy
a
seguir esta ias piracion ;
yo
me rindo
a
vuestra gracia; no
mas dilacion, no mas tardanza•
...
.
PUN-