EXERCICIOS
Diciembre.
tudes~
ihay una sola edad, que esté esenta de
mil
bor..
rascas~
z,hay una condicion, que esté al abrigo de to.–
das las tempestades, de todos los reveses de la fortu–
na, de todas las
adversidades~
Se puede decir, que
esta triste estancia no
v~
nacer sino cruces;
la
tierra
que habitamos, no da flores sin espinas ; no se puede
coger una flor, sin que se punce
la
mano ;
á
mas, que
estas flores aún no bien se han abierto, quando se ajan.
Los mas grandes dias ·son los mas secos; y los mas
cortos no están sin escarchas y heladas. La mas larga
vida solo está compuesta de un puñado de días.
Se
an–
da, se cofre, se suda por coger un poco de humo.
Las
pasiones juegan con nosotros,
y
siempre
á
nuestras
expensas. Se trabaja,se afana por trepar un poco mas
arriba, y apenas se ha llegado
á
la altura
á
que se as..
piraba, quando se nos va la cabeza. Los puestos mas
altos no están mas al abrigo de los vientos; se hacen
grandes
gastos,~y
quántas veces sin
provecho~
Se
lle~
ga
á
la mayor altura, ila ambician, que nos ha hecho
subir
con indecibles penas,
nos dex a largo
tiempo
en
reposo~
La muerte confunde todas las condiciones;
entierra todas las fortunas ; las cenizas , que son el
paradero de todo , no se distinguen. Sola la santi–
dad puede hacernos verdaderamente dichosos , Y
verdaderamente grandes; solo ella es privilegiada;
ella sola nos asegura una habitacion muy sobre la
tierra, y por consiguiente esenta de todas las
vici~
situdes , al abrigo de todas las tempestades,
y
ad~n
..
de no alcanza la jurisdiccion de la muerte. Celestial
Jerusalén, tú eres mi patria; la tierra es mi des–
tierr~
; allí no habrá lágrimas ni llanto. Esta es
la
sola region adonde
no
llegan los nublados
;y
de don...
,
de