DEVOTOS.
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ces ccn
d
enojo de un Dios, irritado por tantos de- · de Pasion..
litos cerno han cometido ' se han hecho sordos
a
la
voz del Señor, han perseverado en el pecado ,
y
han
muerto en
la
impenitencia :
Viri Ninivitte su1·gent in
judicio cum generatione ista,
&
condemnabunt
eam.
Los Ninivitas, decía el S:ilvador ,
se
presentarán en
~l
Juicio con esta Nacion ,
y
la condenarán; porque.
al punto que oyeron predicar
a
Jonás' hicieron pe-
nitencia;
y
ved
aqúí
a
uno' que es mas que Jonás:
Et
ecce
plusquam J-onas
hic.
¡
~ántos
zelosos
Pre ·-
cadores durante la Qiaresma
!
Dios
es
ei que
ha–
bla por su boca , ·mas há de quarenta dias que pre–
dican , . que anutlcian
la
palabra de Dios , que
ainenaz4n .por
su
or~en;
<
y quántas conversiones
sevén (
U
na penitencia ·tan pronta , tan general, tan
ri–
gurosa, de que
el
Rey,
y
los Magna.res dieron exem·
plo los primeros , aplacó
h
indignacion del Señor,
y
detuvo
los
golpes
de
su Justicia :
Et
vidit
Deus
ópe–
ra
eórum
,
quia convérsi sunt de via
sua
mala.
Vió
Dios sus obras,
y
que
se
habían convertido
y
de–
·~ado
su m:ila vida,
y
tuvo miscficordia de ellos ,
y
los perdonó. Notad , que la Es<!:ritura no dice sim–
plemente, que Di0s vió las señales de su penitencia,
porque podían muy bien ser equívocas; sino que aña–
de,
que Dios vió, y consideró que
se
habian conver–
tido de
sus
desórdenes; que no solo habiao deresta–
do sus pecados ,.sino
que
h~bian
rnudado tambie,n de
f:;onduéla. De todos
esos
propositos , de todas esas
<:Onfesiones,de esas lágrimas que se
derrama~
a
VeC~,S
por los pecados , hace Dios poco caso; como wmbien
de
los
ayunos_
y
a_ustjfridades, si
nQ
se
inu~a.
de yida,
r
Tom. IIl.
E
si