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To
S.
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,, Isla de Pathmos , que eílá en el Archipielago , adon-
Día
IV.
,, de le luvia deíl:errado el Emperador Domiciano.
,, Tuvo muchas viÍlones, que debajo de diferent es
fi-
" guras le reprefentaban lo que havia de fuceder
a
la
,, Iglefia en los figlos venideros. Todo lo que
íe
comie-
" ne en eíl:e ·Libro es myíl:eriofo
y
profético.
R E F LE XI O N ES.
S
Ola1nente en la el evacion del monte, donde el ayre
es íiempre puro,
fe
vé al Cordero inmacubdo,
y
e~
fu
compañia aquella multimd de almas efcogi–
das , que no
fe
avergonzaron del Evangelio, y pifando
generofamenre rodos los refpetos humanos , hicieron
gloriofa vanidad de fervirle , llevando efcrito
fo
nom~
bre en la mifo1a freme
a
viíl:a de codo el mundo.
Un~
virtud _mediana, una alma t ibia.
y
cobarde no pierde
jan1ás de viíl:a
á
la tierra,
y
afi folo vé al Cordero muy
de lejos. No baíl:a tener
fu
nombre en la boca:
es
menefter llevarle eíl:ampado en la frent e. Muchos te- ·
men hacer una decbracion tan pública , porque def–
pues es meneíl:er foíl:enerla con una conduéta irrepre–
henfible.
Es
meneíl:er parecer
Chriíl:iano ;
pero cam–
bien es meneíl:er que cada uno fea lo que parece. Nuef–
tras coíl:umbres ,
y
nueíl:ras operaciones han de de–
cir mudamente la Religion que profefamos.
Qyé
gran·dón es la virginidad!
Q!é
excelente.s fo n
fu s
méritos
!
Q!_é
grandes
Jqs
privilegios que goza! So–
lamente bs Vírgenes
Ggueó
al Cordero
a
qua!quiera.
parte donde vaya : ellas. Colas eíl:án cerca de
fu
per–
fona :· ellas Colas , digamos lo aG , componen
ÍLJ
Corre.
Como la virg inidad es el efiado mas pt::rfeéto , el mas
ex~