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ro s
EnerO'
adornandoíe
con
el
pudór
y
con
la
modcfüa;
mas
que
con .los galones, con las pedrerías,
y
con bs celas : que
los
ricos no fea n orgullofos , ni coloquen
fu
efperanza
en las riquezas vanas
y
perecederas, Gno en la bondad
de
Dios, que nos
dJ
los bienes en abundancia:
que
fean ricos en buena5 obras , explica ndolas en limof–
nas
y
en liberali dades. Fina!menre exhorta al mifmo.
Timotbeo
a
que
fea exemplo de los demá fieles,
fir–
v iendoles de modélo
b
regularidad de fu vida ,
y
la
p ureza de fus coíl:umbres. Con todo efo le aconfeja
<]UC
modére
fus
excefivas penitencia ,
y
le ord na
que
beba
un poco de vino, por
fu
grande flaquez:i de
ef.,.
tóm
:i.go,y
por los mole11os achaques que padec ia. ·
Vol viendo San Pablo de Oriente, pasó por Ephe:
fo
para ver
a
fü
querido difcípulo'
y
quando
Jleg6
á
R oma le efcribió otra kgunda Epííl:ob.
No te aver–
git'enccs
(le
d
cia)
de dar te(ltmonio de nueflro Señor,
.Y
de
mí,
que e/ioy en prifiones por
fu
amor.
Aníma-
le
deípues
a
que eíl:é firme entre las comr.1d icciones
y
las perfecuciones de los fal(os Doaores,
y
de los fa[:.
(os herm:mos.
Conferva
(le dice)
con cuidado el de–
pójitode la
Fé,
y
de la fana doEtrina que aprendifl.e
de mí. Predica
,
reprehende, corrige
,
ruef!.a en toda
paciencia; llena con diligencia
tu
miniflerio~,
y
no def
mayespor las contradicciones.
v~endrá
tiempo
en que
el prurito
de oír novedades hará que cada uno buf–
que Maeflros que le hablen d fu paladar,
y
d
Ju
de–
Jeo. H avrá hombres llenos de amor proprio,
y
atef-
tados de vicios, que con apariencias de piedad,
o
con
un exterior aparato de virtud ferán enemi,gos de
la
R eligion.
D eíl:e número fon
los
que fe infinúan en
las cafas para dogmatizar,
y
para introducir el
e~ror,_
va-: