.EX Erf{_CJCIOS
.:Enero.
zon.; Ceah 'reélas hueftras intenciones,
y
rambien lo fe–
ran nueíl:ros caminos. Si no feguimos
al
Señor,
y
íi
folarriente nos oufcamos
á
nofotros
mifmós;
qué
ffiél–
.a:avilla
es que andemos defcaminados
!,
La ciencia de los Santos es una ciencia práaica.
Es
meneíl:er Caber lo que es menefier obrar ,
y
es mene(–
ccr obrar lo que fe fabti que es menefter. Saber la Ley
de Dios con una qencia. feca., eftéril ,
y
p~1ramenre
ef–
peculativa, es faberla cofno la Caben los demonios.,
y
efe genero de ciencia no es la ciencia de los S:mros.
·
Los trabajos q!.:le padecen las alm:ts fanra.s, fiempre
las llenan de honor :
1:-¡
no es efte
el
unic:o fruto que
facan ' de fustrabajos. Ninguno hay que no rinda cien–
to por uno;
y
todo entra en provecho al que padece
por Dios. No folo premia todo lo que fe l1lce por él,
fino tod<? lo que fe defea hcicer. '\4\dmice·el
de f~o,
coma
pudiera el efeélo.
Q
<]Ll~,
buen Duefio tenemos en
nuefüo amorofo Dios
!
Recompenfa lo qlJe fe quiere
hacer; co1Í10
Ít
yJ.
eíl:uviera ' hecho. 'Sola co"n
cefear
agradarle ,
yá
fe
le agrada.
Burlefe el mundo de las almas ju(b,s : haga cha–
cota de
fu
1implicidad , de
fu
reél:imd ,
Y'
de
fu
vida.
arreglada. En vano fe canfa; que la virtud fiempre ha.
de fer refpetable. Eíl:e es un reconocimiento, que
hlfia.
los mas relajados le han de tributar.
. Aunque todo el univerfo coníflire contr1 el
<JL-té:
es verdaderamenre vi[tuofu,
no.lepodrá dal1a.r.. No
guf-<
e.a Dios de Gervos cobardes ;
que eftos poco durarán en
fu fervicio: quiere fiervos generofos
y
fi eles. El mifma
tos ·empeña en el combate; pero Gempre para hacerlos
ronfeguir mas gloriofa la yiltoria. Nunca. fon ven.ciclos
&no los que no
ÍOij
fieles. -O q
é
-bel o efpelb:icufo es
•
el