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EVO T OS.
ciftnas ,
perfidi:is , nuevas
errores, que
brotab.rn,
y
fe
Dia XUI.
multip-licaban cad.1 di:i . Prot gido el Arrianifino con
todo el poder del Emperado,r , d cal m:rnera lu via dc-
fo lado
la
viña del Señor, que :i íegur:i
nu.eftro SJnto
no h.w er encont rado
mis
que cr Obifp
s
que
no
foe(en tota l
y
defc ubierrameme Arrianos : lo demás
vivian tan laíl:imofamente deframin:ido ,
qu
Dios ape-
nas era conocido por los Pr lados
e b s
diez Pro-
vincias de Afia , como él mifmo fe expl ica ,
y fe
lamenta.
En eíl:e theatro, pues, fu e donde
mas
brillb,
y
mas
gloriofos frutos produjo l.a fabidL! rÍa,
el
zelo,
y
la pru–
dencia de Hilario. Animad-0 íiernpre con el efpíriru de
J efü-Chrifro, combatió
á
los enemigos de la
Fé
con
un
ardor can vigorofo,
y
al mif
mo
tiempo tan prudcme,
que
no
pud-ieron cogerle prenda. Conociendo el genio
fa láz
y
arrificiofo de los Hereges en fus diverfas con–
fefi ones de
Fé,
a
qual
mas capciofa,
v.olvi6
a
tomar
la
pluma en .defenfa de la caufa del Hijo de Dios ,
y
exponiendo
a
los ojos de codo el mundo
el
veneno del
'4:rror ,
iluílrb
con
tanta claridad todos los puntos con..
ttoverridos ; hizo tan
p~ueme
la verdad de
la
Fé Ca–
thólica,
y
lo
hizo
de una manera tan plauíible, que de–
biera efpi rar el monftruo de la Heregía,
fi
el genio de
eíl:a Hycha fuera reducible. Compufo por el mifmo
tiempo otras varias excelentes obras,
y
entre ellas el
~dmirable
Tratado
de
los Synodos ;
y
trabijb tan glo·
riofamente en fervicio de la IgleGa , que pudiera p:i.–
xecer no haver fido
envi:i.doa
un País tan remoto
mas
~ue
par:i reftablecer el Reyno de Jefü -Chrillo,
y
refrrwar la Rel igion verdadera.
Celebrabanfe por entonces dos famofos
Concilio ~
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