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EXE~CICIOS
Enero.
dificultad , todo m'e hace efiorvo
!
Q!.ántos pt'udentes
a
lo del mundo fe bmlarian entonces de la credulidad
de
los Santos Reyes, tratandolos quizá de fencillos
y
li–
geros? Pero el clia de hoy havrá quien los califique
de
muy
f.iciles,
o
de nimiamente
dóciles~
Encubri6feles la eíhella por algun tiempo; mas
no
por efo fe quedaron fin auxilios
y
focorros. Siempre
hay
libros efpirituales
y
devotos: nunca falt:t. la luz de
los Direll:ores prndenres
y
zelofos. En medio del
tll•
multo , del bullicio del mundo, fon poco ·freqüenres,•
fon muy raras las gracias extraordinarias
y
fenfibles:
debilitanfe mucho quando nos
par~mos
dentro de él;
pero en faliendo del bullicio
y
del tumulto) vuelve
a
defcubrirfe
la
eíl:tella
,
y
con
ella
el confuelo
y
la ale–
gria. Dichofa el alma que es coníl:anremenre
fiel
a
la
gra·
cia!
Q!.é
confuelo
!
haver fido mas
fiel
que otros en fe–
guir la eíl:rella,quando fe logra la dicha de haver encon•.
trado
a
J
efü-Chriíl:o
!
Eíl:a es la fuerce de todos los
que
le
bufcan con valor , con confbncia y con fidelidad.
No miréis, Señor,
a
mis pafadas ingrarirudes:· brille
·~e
nuevo la luz de vuefüa gracia; que determinado
cíl:oy
a
no fer mas infiel
a
ella. Mandadme , Señor,
quanro fuere dé vueíl:ro agrado , que pronto eíl:oy
con
el
focorro . de vueílra gracia
a
cumplir exaétamentc
todo
quamo me mandáreis.
JA CU LATO RIA S.
[Aquere, Domine
,
quia audit (ervus tuus.
1.
Reg.
3.
Hablad,
Señor ,
que vuefiro {!ervo
oye.
Ho-