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EXBrJ\CICIOS
Enero.
cada di'a con fus fieles fiervos. Pocos
hay
que en el
difcmfo
de
fu
vida no hayan experimentado cien pe–
queños milagros de la divina proúdencia. Seamos no–
fotros Pueblo
fuyo ,
y
experimentarémos que
él
e.s
nuefiro Dios.
Qié confufion , qué ·vergüenza la de los nobios
quando fe hallaron fin vino en
la
mefa.! Pero
eíl:á
en
ella Jefü-Chrifio
?
Afifie allí
fu
Santifima Madre? Pues
no hay que temer. Aun quando no pienfan en
la
falta.
los interefados, pienfa en ella la Sefiora. Y qué hace?
No mas que puramente reprefentar
a
fu
Hijo la neCC:•
fidad :
No tienen vino.
Lo mifmo praéticaron las her•
manas de Lazare:
Señor, el que
mas,
eftá enfirmo.
Dios
bien vé
lo que nos
falta, fin
que fea meneíl:er
advercirfelo ; pero quiere que fe lo pidamos
eón
con–
fianza.
~ancas
veces alab6 él mifmo la
fé
de
l~
que le pedian alguna gracia? No pocas veces tarda en
focorrernos , hacefe fordo , muefrrafe duro
á
nuefiras
fúplicas. No importa : tengamos confianza ,
em~eñé·
nios
a
fu
Madre , hagamos todo lo que él nos dice ,
y
bien preíl:o acudirá
[u
providencia
a
todo lo que
nos
falca.
Nueíl:ros arbitrios humanos,nueíl:ras medidas,nuef..
tra áparente prudencia muchifsimas veces folo íirven
pa~
ra defconcertar
la
economía de
la.
providencia ,
y
fon
obfráculos
a
los delignios
de
Dios. Ocros firvientes me·
nos dóciles quizá
huvieran
penfado
que
no era buen
medio para tener 'vino llenar las vafij1s de
agua.
Amémos
a
Dios; obedezcamosle, tengamos una
tierna
devocion con
la
Santifüma Virgen ,
y
fiempre ferá
di·
cáz nueíl:ra confianza.
O
mi
Dios
!
Y
que láftim
!l.fedeb~
tener.delos que
os