".
ñ "E SAN
:ANTOKIO DE
p
.Á.OUA~
.
·3
63
afligidos naufragarites. Rara def-
para mirar ei
tormento
de la
tor.:i
treza de Antonio , que anegue menta, porque allí tolo
prorrum~
las inquietudes con los fofsiegos!
pio ,
que en Dios ponía
Ja
t'fpe-!
~e
tríunfe
fu
prall:ico conoci.
ranza:
Qt'tm
/pero
in Deum meum.
' miento
de un Mar de commocio-
.
14 ·
Pues
que
ma~
falta Je ha•
nes,
y
le transforme en pielago cia la
~ifta
, que la voz ; que Ja
de ferenidades
t
Qg_e les fueffe garganta, que el oldo, que el
luz ,
y
les fixaífe nuevo Norte
pecho,
que el corazon,
y
que la·
con
fu
refplandor
!
Mas no es
1
alma
r
Antes era mitigar el fofio,.
mucho, porque Antonio es un no aver ojos paTa mirar
el
ama~
Divino praél:ico, que en fus bra-
g-o ; porque aufentes los agra.;
zqs
oftenta un nuevo Norte en vios, deíinayan los fentimientos•
Chrifto Niño. Por e!fo los pafso
Dare
a
efta duda la fatisfacion.
de un
M~r
turbado de horrores
a
La mayor al cura de el Mar ,
ref~
·un
Mar apacible de piedades, de peéto de la Eilrella del Norte, fe
un Norte obfcuro
a
un Norte da-
halla donde no fe
ve
la Eltrella;
~o
, de un Norte humano
a
un
porque quanto mas fe elevan
las
Norte Divino ;
y
finalmente de
aguas, mas fe efconde. Es
pratH~
un Mar de aflicciones
a
un Mar
ca de la Nautica. Eftando
la
Na.:
éle profperidades.
ve en efta altura , no fe divifa,
el
. 13
Si puede aver hermofura Norte, que indica los rumbos de
~n
horror , hermofamente refier.e
tas
aguas: con que fe hallan cie-1
David una tempeflad. Navegaba gos al govierno del timon los que
(d ice)
por los efp
cj
s
el pie-
atendian al movimiento de
Ja,
lago, cogiendo al
.ra fobre
el
Ethell.a ;
y
como
a
David le
co~
artico Polo, quando opueíl:o
el
gio
efta tempeftad en efta
altura
tiempo
a
mi defc nfo, me difpu-
del Mar , donde no miraba Nor–
fo una·
tormenta:
hlnchofi el gol-
t e :
Veni in
altit~ditwn
maris,
fe
fo, y tremulo el
~rifl:al,
mas fer-
quexo de
la aufencia de
fu
luz
,
vía.deefpejo
.a
mi .tragedia, que_ mas que de los rebatos; porque
de diveríion
a
mi
fatiga.
Al cla-
em~ates
de las ondas , podra
fu;
mor del fufto, fe enronquecio
et
frirlos la confiancia; pero perJi.;
pecho ,
fecofe
la garganta , en-
das del Norte,no las puede
tole~
tro[e
la inundadon hafta el alma,
rar
la razon.
Con
ojos
prefume
el
)r
fe
ahogo
el
corazon fobre
el
defeo haHar
puerto
a
Ja
efperao~·
pecho.
Sumergieronfe los ojos
za; pero fin
ojos
te
pierde
la
ef-1
en tanta agua,
porque
hafta los
,reranza de
ver
puertos al
defeo~
o jos
perecieron en la tormenta:
Deftcerunt
,
&c.
Veni in altitudinem ,;,1aris,
&
tem-
1
5 Efte horror, elle temor,
D avidPfa!m.
pe.ftt1s demerfit me
,
lahfJravi e/,¿.
que
{e
excedio en David , no
tu-
68.verl.;.
r.
fi
d
,¡:,_
1
11
d
d
mtJns
raucte Junt auces
me~~
eJe-
vo ugar en aq_u e os
evotos
e
cerunt
omli mei
,
durn .(pero
in
Antonio. Pufofeles Antonio co-4
Deurn
weum.
Bien pondero Da.-
mo Piloto
a
la vifta,
y
les
fi xo.
vid lo fobervio de las ondas, lo mejor Eftrella en fus brazos: Lue.;
..
indomab!e del
uracan ,
las que-
go del mayor riefgo 'que
pon~
:xas
l~s
angufüas, los ahogos, los
dcro
Da vid, los
taco
Antonio; _
anh~tos
; pero donde realzo
el
porqu~David
folo tu vo por
gran~
paradoxa fentimiento fobre las
de el rrefgo
d~ ~er
re.fin
.Norte
<'f:\
demoftraciones de
fo
llanto, fue
la altura:
Vent m
alt ttu ::Jrnem::
Di–
al decir, que le
faltaron
los
ojos
ficerunt oc11/i mei
;
y
ellos en la.
Tom<J JI.
Hh
2.
ma~