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2

EXCELENCIAS DE SAN PEDRO.

rian

efcanda.lo

en el Senor

,

dijo

á

íl1

Divina Magdl:ad:

¿No pue–

do feguirte ahora? pondré mi alma por ti.

(b)

Y

luego dice San Mar–

cos , que añadi6:

Aunque todos

fe

efcandalicen en ti

;

p«ro yo nunca

tengo de efcandalizarme:

(e)

porque efloy aparejado de ir contigo

á

la

caree!,

y

á

la muerte.

(d)

Refpondi6

el

Señor

á

San Pedro :

¿Tu

'Pida pondrás por mi? fDe "Perdad te digo, Pedro, que tu hoy

,

efla no–

che

,

antes que

el

gallo cante

,

tres 'lJeces me negarás.

(e)

No

dará

el gallo dos 'Peces

fu

canto, que no niegues tres 11eces que

me

conoces.

(f)

Pero San Pedro con mayor fuerza decia.

Aunque

Jea

necefario

morir contigo

,

no te

tengo de negar. Lo mijino que

San

Pedro, dige–

ron todos los demás Apofloles.

(g)

Eíl:as fon las razones que paforon

en eíl:a ocafion, conforme

á

la contextura de los quarro Evan–

geliíl:as, tomando de cada uno

íl1

infalible relacion. No hay

duda que entriíl:ecerian

á

todo

el

Apoíl:olado las palabras del Se–

ñor ; porque conociendo que era infalible

fi.1

verJad , por fer la

mifma verdad

el

Señor ,

y

que no pudo faltar lo que decia,

aífe–

guratídoles

fu

Divina Magdl:ad , que todos aquella noche cae–

rian , y efcaeccrian, ¿quién no lo habia de fentir? Porque de–

cirles : todos cíl:a noohe ereis efcandalizados en n1i : no tj\lifo

decir ,

á

lo que

e

t. endo , como fiemten algunos Expoíitores:

huíreis de mi , o os a

a~tareis

de mi, fino cáereis efi:a nóche,

que es

lo

que ftgni ca propiamente ,

efca

zda/;izarfe

,

tropezar

en

el

efcandalo,

Ó

encuentro ; de fuerte , que la tentacion fue

el

encuentro ,

(h)

y los Apoíl:oles los que caminando por la vida

efpiritual , cayeron en tentacion.

· ·

.,

z

Tampoco íignifica, que los Apofioles perdieron aquella

noche la

fé ,

porque es cierto , que no la perdieron , contra al–

gunos que afinnan lo contrario ,

(i)

folo perdieron ,

6

entibia:–

ron la caridad , y dejaron de hacer la profeGon de la

fé ,

6 te- .

niendola en

el

alma, no fe atrevieron

á

confdarla,

y

pro.teíl:ar–

la

con los labios ,

y

en los labios. De uno

á

otro hay muy gran

diferencia , porque

el

no profefarla, es ten1or natural,

y

aunque

es

(b)

~o

ego

"Pad~,

non potes me modoflqui

::

R!'are non

pojfum

te fé1ui modo? animam meam

pro te pgnam.

Joan.

1

3.

v.

3

6.

&

37.

(e)

EtjiomnesfcandaliZ!ti. fuerint in te :ful non e_(o.

Marc.

14.

v.

29.

(d)

Tecum prrratus fttm

&

in carcercm,

&

in mortem ire.

Luc.

22.

v.

3·3.

(e)

Animam tuam pro me pones? .Amen, amen dico tibi: non cantabitgal/tu, donec ter me

neges.

Joan.

1

3. v.

'.!

8.

(f)

Priufquam gallus J;ocem bis dederit, ter i:ne es negaturus.

Marc.

14.

v.

30.

(g)

Et

Ji

uportuerit mefimul commori tibi non te negabl). Similiter 11utem,

&

omnes

dicebant.

Idem ibid.v. 31.

(h)

Barrad. tom. 4. lib. 3. cap. 23. Liran. in Glof. Matth.

26.

&

alij.

(il

D. Chryí)t.D.

Aug~íl:.

apud

SiJv.

t?m.

5.

in Evang. lib. 7. cap.

1

o. expofit.

3. Maldon. Barrad.&

<lhJ

commumt. contra Franc1fc. Luc.

~

Com. Alap.