DE SAN AGUSTIN.
~
I
·Suceda
en
tí
lo
que en
otro
Salmo
se dice , habiéndose hablado .de 'la
flor de estos Zifeos; á saber es , que
digas (
1):
tus
pensamientos son dema.-:-
·
siadamente profundos
;
digo,
que
allí se
añade, que
el imprudente
es
.quien
no
conocerá
,
y
el necio no entenderá es–
tas cosas.
Qué no .
entenderá~
cómo
es la
perdicion eterna de
los
peca-:–
dores, el
levantarse
como
el
heno,
y
·atender
á
quantos obran mal.
Agra–
dóles
la
flo·r de los malos,
y
dixeron
entre sí: mira,
los malos florecen, sin
duda les ama Dios .:
y
agradados de
la
flor de los malos , se inclinan
·á
la
n1aldad para su perdicion ; no
por
breve
tiempo, como
florecen
aque-
(1)
Psa!m.
91.
6.
Biij
,