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· ~us borctes no se refringe tan regularmente ., como la
que
le
Fíg~ ./
hiere en
el
medio.
5 4 7
La apariencia .de un obgeto 'Visto con un anteojo
ó
microscopio dado es mas
ó
menos
clara
á
:proporcion de Ja
aber-
,
.
'
tura
del
obgetiv0,,,
Porque si suponemos que dicho
vidrfo
esté cuhierto to•
éto él, á excepcion
de
un córto espacio
que se
dejará sin cu–
brir en su medíµ, no pade~erán al'terac~on ·ninguna las mag....
ninrdes
d·e
las imágenes
pq
formadas en el foc;us de los _vldrios,_
ni
las
de las
imágenes pinra·das
,e~
-el
fondo
del
ojo ·; pero
si
se
hace menpr la abertura ·del obgerivo, ·cada manojo se com–
pondrá de una cantidad menor de
rayos
, /y
por consiguiente
,.-concurrirán en menor número
á
formar cada punto de las
imágenes , ·con lo que parecerán más obscuras. Si
se
le con–
_serva constantemente á un mism9 obgetLvo su abertura ,_pa–
recerá
que
los ohgetos tienen
mas
ó menos resplandor, con–
forme fuere mas
ó
menos
'larga
la distancia
focal del
ocular;
quiero decir ; conforme el anteojo
~
microscopio amplifique
masó menos (
4
9 6
y
5
~
5).
Porque
una misma
cantidad
de
luz
estendida en una
imagen
'mayor
ó
menor~
ó
en una
parte.
:del fondo del ojo, hace que sea mas
clara
ó
mas ~bscura-.
; 4 8
La
diferencia
que hay entre
el
anteojo astro-
n.Ómico ,
y
el anteojo
Batá-vico"
ó
de
Galileo
,
consiste
et1
que en vez de colocar un ocular convexo entre
el
ojo
Y,
la
imagen ,
á
fin- µe conseguir sean paralelos los r~yos de
cada uno cle los manojos que han de entrar en
el
ojo, se
hace
uso
de un ocular c6,ncavo
AE
poniéndol-e
en rre
el
4
I
..
6.
Tom.VI.
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ob-