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con mucha mas razon
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onncará
á
iiu Hijo muy amado, que riada quie-·
re
,
ni desea sino la gloria de su:
Padre ; y por lo mismo hi mereci~
do , que su Padre pensáse en la su..
ya,
y
sin tardar.
.
¡-Qué gloria
!
Empero conside–
mos de donde viene , y en qué
cir:
cunstancias .habla de ella Jesu..:
Christo. Es en el momento que Ju•
das parte para ir á consumar si.i
· delito, y á entregar su Maestro. Del
delito mas execrable ha de nacer
esta gloria de Dios, la mayor que
huvo jamás ; y de la mayor de las
ignominias que sufrió Jesu-Christo,
se sacará su mayor gloria. Chris–
tiano' ten animo quando el delito;
y
las injusticias abundan; pues Dios
no permitiría jamás el mal , si no
pudiera sacar de él un gran bien;
y
quando rebosa la malicia , en~
tonces es quando halla medio
de
acrecentar su gloria. No desma–
yes quando te veas entregado á
t~»
enemigos ,
y
á las mas terribles an·
gus-