2.86
ligion }
tnanifesto
~u
Doétrina ,
mihrgros,
con
tanto esplendor, e -
mo en
qnalquiera
otro lugar
de
lá
Tierra
Santa-
En, Bethania ,
qu
estaba
tocando
con
las
puertas
de
Jerusalen ,
resucito a
Lazaro.
Los
Jerosolimitanos~
que havian
v
·st
esta
espantosa
Resu
rreccion
en...
grosaron la ·Cornitiba que
el
Sal–
vador llevaba , segun denota
el
texto
de
San
Juan.
Lo que obligaba al
Salvado a
vivir -ordinariamente
en la
Gali•
lea era , que
los
Pontifices ,
y
lo
r
otros' que
maquinaban
su
m
lerte,
no
tenian
ni el mismo
poder ,
ni
las proporciones .,
y
medios
para
executar este designio en
aquel
País ,
como
en
Jerusalen ,
y
en
st
cercanías.
Y
esto es
lo que
d10
h¡
gar
al
cumplimiento
de la
prophe
cia de
Isalas
~
ql:le
acab·
mos
de
vér. Todo acaec1a conforn1e
á
las
clisposiciones de la
divina
Prov1
deoc1a , po ·que Jcsu-Chris o
de
bia
pasar
toda.suv
·da en la
pe
s
cu-