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ltormentado. Ademas, que entre
vo·
sotros,
y
nosotros hay un_ abismo muy
grande , de suerte que los qué quisie–
·ran pasar de aqui allá, no podrian,
11i
.támpoco venir de ahí acá. Padre,
replicó el rico, ruegote, que le embies
á
casa de mi padre , donde,tengo cinco
hermanos , para que les prevenga ,
y
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les suceda
el
venir tambien
á
este
lugar de tormentos. Respondióle Abra–
ham : allá tienen
4
Moysés., y los Pro–
fetas ; que les escuchen. No padre
Abrahan , continuó el rico , ·mas si
fuere
á
ellos alguno de los muertos
haran penitencia:. Responaióle Abra–
han: si no escuchan
á
1
Moysés, y los
Profetas, tampoco oreeran aunque re-
,, sucitase uno de los muertos.
San Marcos.
Estando
en casa, vol–
vieron
á
preguntarle sus Discípulos so–
bre este mismo asuntó ;
conviene
á
sa–
ber, so~re' la .indisolubilidad del matrimo–
nio,
y
les _ctixo: Qpalquiera ·que repu–
diare
á
su muger, y se casase con
otra,
comete adulterio contra la ' primera.
Y
O
si