JÓSE MEJlA
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para que se realice la ceremonia de la posesión del triunfo.
.El Curaca, con gran soleinnidad, se levantaba a pisotear los
prisioneros
y
al botín que existiera, adjudicándose, de
est~
manera, la victoria obtenida. (26). La autoridad que había
delegado al Sinchi no le daba derecho a éste para utilizarla
.como plataforma de prestigio personal en detrimento de las
instituciones permanentes, lo que significaría una violación
<J,ue se haría en contra de una entidad juridica legítima
y
reconocida por
el
consenso general. Si el Sinchi había ob–
tenido el mando total,
~había
sido, únicamente, ante la an·
brustia de un estado de necesidad
y
frente al imperativo de
unificarse en la ·voluntad de mando, única forma de conse–
guir efectividad positiva en una campaña guerrer<l:.. Era
por eso que su retorno victorioso, estaba obligado
<!:
presen–
tar los despojos del enemigo ante el" Curaca, para que éste,
1nediante una ceremonia solemne, se adjudicase para sí, en
(26) Betanz06.-Suma
y
narración, etc., Ob. cit., Cap. IX. p.
119: ..Porque habrán de saber que tenían una usanza estos
señores que cuandp algún capitán o capitanes venían victo–
riosos de la guerra traían las insignias
y
adornamientos de
los tales señores que en la guerra mataban
y
prendían;
y
como entrasen los tales capitanes
por la ciudad del Cu'zco
victoriosos (de los Chancas) e traían delante de si insignias
y
prisioneros
y
poníanlos
1
delante de sus señores
y
los seño–
res viendo el tal despojo e insignias
y
prisioneros, levantá–
base el tal señor· e pisábalo e daba un paso por encima de
los tales prisioneros . Y esto hacían los tales señores en se–
ñal de que recibían los tales que lo traían triunfo
y
favor del
señor
y
era acetado en servicio el trabajo que ansí habían
pasado en sujetar
·Y
vencer a los tales enemigos. Y ansimes–
mo el señor a quien era pedido que pisase las tales cosas
y
prisioneros, recibía
y
había haciendo aquello, posesión
y
se–
ñ.orío de las tales tierras que
ansí eran ganadas
y
vasallo'S
que en ellas vivan".
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