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ción fuera de la placa, amenazan extender la lesión hacia arriba.
El
día 26, el brazo izquierdo está aumentado en 5 centímetro a causa
del edema. Está pesado, doloroso
y
caliente. No hay ganglios axila–
res. La temperatura es normal. Observando la placa se notan algunas
pápulas en inminente transformación vesiculosa, otras n franca ve–
siculación. Estas últimas son más grandes, del tamaño de una habi–
chuela, están tensas y contienen un líquido transparente de color
citrino. Estas vesículas semejan, por su coloración y forma, gotas de
goma líquida sobre la piel. Hay, por fin, otros elementos cuyo con–
tenido es más bien purulento y otros ya rotos que manan pus. Todo
amenaza transformarse en una llaga. Por suerte, al día siguiente,
después de algunos baños tibios de permanganato de potasio, la le–
sión entra en período regresivo. El dolor desaparece. El prurito
y
el
ardor disminuyen y 15 días después queda solamente la coloración
obscura característica.
17
años, soltera,
ero, argentina, 16
forma
.rolongada, Sala II,
quelirac o en a C ar e anterior del codo
izquierdo e
ía
e
·o de 1928. Dos días después se observa li–
gera rubicundez localizada con prurito. El día 6 de julio se cons–
tituye una placa rojiza, sumamente pruriginosa, de 8 centímetros
de largo, caracterizada por tener un reborde de coloración más acen–
tuada. La superficie es áspera y caliente
y
su contorno irregular.
El día 11, la placa continúa en sus mismos límites, aunque de un '
color más obscu;ro. Su superficie es lisa
y
el prurito es solamente
nocturno. Algunos días después se forman pequeñas escamas fur–
furáceas
y
entra en franca regresión. La prueba ha sido positiva.
El 23 de agosto del mismo año es reinstilada con resultado po–
sitivo.
Observación N
9
31:
Petrona López,. argentina, 40 años, casada,
trigueña, tuberculosis ganglionar. Sala II, cama 16.
Instilada con tintura de quebracho el 3 de julio, no se observan
fenómenos reaccionales hasta el
dí~
9, en que aparece una placa lige-