EL
CUZCO
HISTORICO
Y :MdNUMENTii..
•
1
ei
de plata repuj.a1da, eon decoraeiooi.e6 d.e · un ·arte soorio .
y
elegante. La pa.rtie posteri·oir es do.rada.
.
La Sacristia., junto al Altar, contiene cajas-, a
:ricon.es, es–
ta·ntes y puertas ae cedro, que ostentan primorosos
trabajo~
'
de talla<:tio y dibujo.
-·
En el muro princi¡pal, y en un niidho. enr:oojaido,
s.e
en;cu ei:–
tra el famoso li·enzo denominaido
•~El
Cristo de Van
Dyck' ',
win
funda.mento alguno, aun:que su mérito a-rtístitc-o no sea
pequeño. La infiueDlCia de l·a escuela :fl.aimenca está mani.–
fi,e-sta. Se J.e tiene así encerraido, po:rique, ha;ce unos cuatro
año-s, ma-nl(} saied1ega arrwmc6 el Cllla-dro de su marco, y ya
lo t-enia'
escowd1.i.doen una de lais· alaicenais del tean¡plo, cuawdo
se <Iewu.brió el a t entado, sin
q~e
hasta hoy se conovca al
atreviido que tal
o~.
E.n lo alto -die las paredes está n los re–
tl'atos de todos loo Obispos, e;on sus respectivas l eyendas.
En e:sta Sa.cristf ta"llllbién
5'e
gual'ldan 1as joyas _de· la Ca–
ted·ral, entre la11
cuales
&a
digna de cono•c-erse la célebre
Custodia., de la que queda sólo el viril, y cuyo costo en el
coloniaje
se
calculaba _en .ne>v-enta mil pesos. Es ofuscadora
la riqueza
.f
e~l·enicfor
de es·a joya, cuajaida de p erla s, bri–
llantes, e.,mera1da.s, que unidas al m€rito. del trabajo, la ha–
cen digna de la admirrución gerueral. Tienie, so·bTe todo, valor
iwca.foulable, un dragón de esmeralda de una sola pieza, que,
según opinión de ex:pert-o.g, val.e él solo por todo el resto de
la Custo.dia. El Obispo Ped·ro· MoreiUo Rubio d-e Auñón fué
el
donante de
es.te teso.ro,
y
lo fabrkó Gre.gorio
E.
Ga'hlegos
en
1748.
Es también notable
u.na<10.rona die la Vir.gen llamaida La