d(
!tt
Com¡ ttñia
de
Jefus.
4
3
munacrJ
,
én los quales fe echan muchos Ria chue–
los, que fecundan las tierras. Los primeros Luga–
r es al
Oriente fon los
Eirinucas
,
Mopojicos
J
y
muchos otros. Al Poniente fe hallan los de
Z unaa–
t aca
,
Qyitemota
,
&c. Tirando azia la punta del
Py ra mide fe encuentran , los
QJ!imitica J , Bov ituzay-–
C.l
,
&e. Los
Zibacas
,
que no
eíl:an
diítanres, han
fido prefervados
haíl:a
ahora de las irrupciones
de
fus mortales enemigos, los quales aífolaron lo
ref~
t ante del Pais. Entre el Oriente ,
y
el Norte ,
a
las
e fpaldas de los Zibacas,
y
muchas leguas mas
alla,
fe hallan muchos Puebtos barbaros ,
y
entre otros
los
Map.Jjinas
,
Nacion
n1uy
brava , pero que ha
fi~
d 1.)
defhuida en parte por una efpccie de paxaros).
llaEI~ados
Pertjiucas
,
que viven debaxo de tierra ;
Y;
no fiendo tnas grandes que
un
gorrion , tienett
tanta fuerza,
y
fon tan atrevidos , que viendo un
Indio , fe arrojan
a el, y
le matan. Enfre\}te de cf-1
tos Pueblos
eíl:an
los
Mochozuus
,
y
los
Pouzas ,
que
van totalmente defnudos ;
y
las mugerés no llevan
rnas que una venda , que les cuelga del cuello ,
pa~
ra que no caygan fus hijos. Los Tapacuras van
tam~
bien defnudos ,
y
fe alimeQtan de carne
hutnaná ~
cerca
de ellos eíl:an
los
Bouros
,
y
otros
mucho¡
Pueblos,
y
de muchos
de
ellos no. fe tiene
aun.no~ticia alguna.
En quanto
a
la Religion de eíl:as gentes,
y
de
las ceremonias que obfervan, no fe halla
en
todas
las Indias Occidentales Nadan alguna tnas fuperf–
ti
·io ra , que ell:a de que tratatnos. No obftante,
por
cmnedio de las fabulas groíferas,
y
ridiculas}
y
de
los dogmas monílruofos, que los hacen efclavos
del
Demonio, no
fe dexa
de
defcubrir
algunas
huell as.
;F
L.
de