71
.
En 1\.fa!turca ácia el
·año de
IS'l5
!n
. tie·~po
de
la gu!rra de
las
comunidades,
fueron los patriaras
diri–
giJos pC?_r
el obispo de Elvas que
era
uno de ellos á
la
lnquisicion
3
con
ánimo de qaemar
rodos
los
papeles
y
de :•nofer eJ edificio ,
sin
du~a
porque
miraban
.aquel
es•
· tabledmiento como enemigo de la
líb!nad
civil ; . pero
acudió
e1 e-hispo
de Palma , .qwe era realista ,
y
pudo
contener
los. Los
inqu·is·idores
nocteyéndose
se
guros
se
escaparon
ecohamenre
de
la
.
is.la,
d{)nde no \'<Jh ·ieron
á
poner
d
p1e ,
hasta que
frusrrados
los conaros del pue–
blo por Ja suerte con u
aria
de las armas ,
cesó
del
todo
aquella
:tormenta
y
siguió
d
antiguo
sistema
de
opre–
sion (
6'1 ) .
:
U no de Jos albor( tos mas
terribles
ocasionados
por
la
loquisicion
fué
el
de Nápoles
en 1546.
Excrac–
·taré
la
prolix1
relacion
que de él hace el obispo
San~
doval , .conservando en quanto .
rueda
sus mismas pela–
bras
,, Era," dke, virey de
Nároles
D.
Pedro
de To–
ledo , persona
han
o
mas
nLbfe que
dt!
bu-t:
na
coodidon.
Habíale dado el
emperador ·GáT'Ios
V ..
.órd~n
para qoe
en
Nápoles
se pusiese d
~fido
de
la
sanra
Inquisidon
en
la forma que los
reyes (
atólkos
la
.babran puesto
en
España. Hallábase
mud1a
dificultad en
t ·S{e
hecho .,
por
que·
les
napolit3ncs,
y
todas
las demas
naciones~
salvo
Ja
esp<1ño!J , ti:neo
por
insufr
ib1e
y
mas que
dguros<J
este tribunal. Antes que
~1
v
irey
propusie se
en
<ons~jo
~sta
deter minacion ,
IU\'O
maneras ce mo aneter
en
oficios
públicos
á
mur hos de quien se sasddizQ , que serian _de
este parecer' Quando
ya
le
raredó
-tiempo convenienre
para
enlabiar
el
negocio ,
pro¡
úso·le
.con
la
moderacior1
posibl~,
fncaredendo . a1
pnt:blo
el
servicio
grande
que
á
l>l ~ s
se
hada
y
al tmperador ,.
por
lo
mucho
que S.
M.
( 6
2 )
Páramo
lldd.
Lib.
;11.
Iit.
JI. Cap. II.
n.
40.