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J
AME
RICA
A.
2
3
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rar en un caos· tenebroso ,
y
digno de
compasion. Ni la Religion hará progre–
sos·, ·ni la Fe ·desplegará sus banderas,
ni ei Evangelio reproducirá sus .triunfos,
ni la virtud cantará sus victorias , ni las
letras adquirirán aquel punto
de
gloria,
- á
que ellas mismas caminan quando cor–
ren sin
embarazQ.
Y
en este caso reso–
narán en vuestros labios por presagio .del
tormento ; que ha de afligir vuestras al...
mas , aquellos funestos ecos que se oyen
en la boca de los impíos
~,
cómO ilacion
legítima de su ignorancia : luego hemos
errado el camino
de
la verdad , ni nos
ha alumbrado el resplandor de
la
justi–
cia , ni el sol de la inteligencia
lía
na–
cido' par nosotros. De este · modo , vo–
sotros , ; esotros mismos sereis el objeto
mas
minable
de
las
iras de un
Dios ,
ven
.a
r ;
y
yo , siguiendo las ideas del
1
Lib. Sap.
cap.
5.