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lfi-
de la natm·aleza ha sanciooado
é
ünpuPsto
á
cada ser,
á
cada fantilia de
lo~
distintos reit1os
(]lW
la componen.
Proclamado el comunismo absoluto y universal, era
muy lógico que cada hombre brincara por encima ele
los principios y de )as l
eyes estabiPeidas, y con
~ntu
siasmo exclan1é-tra: "mi ra7.on es soberana, mi libertad
es absoluta
é
indf'pendiente: yo soy dnefío absoluto
de torio lo que apetece tni cuerpo,,; y ved aquí el orí–
gen natural del
racionalismo,
el
liberalismo
y el
sensua–
lismo.
Todas estas tPorías modernas son hijas de su
padre comun el
comunismo
del Eden.
·
Querlaba abierto el manantial de los rlecantados
p1·incipios del año
1789.
~~.
carácff'r
ff'rvi;-~te
de los
filósofos franceses no pocha \r en 7.aga al gemo prsRclo
de los filósofos alen1anrs.
I ..
levados por el fuego de
esas teorías planteadas de ante mano por el
ContTato
social
y por la
Enciclopedia
no et a posible que
s~
li–
tnitaran
á
escalai· el trono real, sin subir
á
Jos altares
y
eleva~se
hasta el .tr?no de
~ios.
ApenRs lograron,
por medio de la sedJCwn, reumrse en asan1blea,
~~cali~~
ficáronse
á
sí propios con el título de
representantes
"
de la nacion,
investidos de todos sus poderes
y
oP–
"
positario~
de toda autoridad .. Dljose al monarca que
" no era mas que un mandatano del pueblo, encarga–
" do de IR Pjecucion de las leyes,
un funcionario púbU–
"
co,
un
comisionado.
Díjose al pueblo que en él residía
'~
la soberanía,
y le alen1 Rro u
á
que
hicif~se
uso rle (:lila.
~~
Hablándoh:1 sirm;))'e de sus
derechos,
y
nunca de sus
"
debe1·es,
y repitiéndole que era
libre
y qtw
todo
lo po–
~~
dia,
se excitó al desenfreno
y
S8
dió
f~Inpnje
á
la re–
" volucion." Sentados estos principios. "El PrPsiden–
" te de la asamblea presentó pritnero esta proposicion:
~~
la pro
piedad de los bienes del clero pertenece
á
la na–
"
cion;
pP.rohabiendo sido desechada por una inmen–
" sa n1ayoría,
nnfilósqfo
diputado qui7.o conciliar las
" divergencias proponiP-ndo:
que los
biene.~
del clero se–
~~
rrán puestos
á
disposicion de la
nac~·on.
La
medida
~~
venía á ser igual en el fondo, y los rlefensores del
" clero pidif'ron la ·discusion sobre este importante
" asunto. Pero
los filósofos
z~:bre-pensadores
no acepta–
"
ron discusion:
y
l-os enemigos del clero exigieron que