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~
EXERCICIOS
- Septierr.rbre.
1os caminos "de Dfos. Desde entonces fue su vida
.~
.
-·
un contínuo exercicio de la mas rigurosa peniten·
cía. Dexábase ver. algunas veces
á
la puerta de la
Iglesia
1
con la cabeza de!Jnuda,. cubierta de ceni–
za , postrado en tierra, pidiendo
á
todos los Fie–
les que
implorasen la misericordia de Dios por
.
aquel miserable pecador; para humillarse mas,
y
para abatir su natural orgullo, c::onsigui6
á
fuerza
de grandes ruegos que le encargasen el cuidado de
limpiar
y
de barrer la Iglesia. Vivia en compañia
del Presbítero Eusebio, á quien si.empre c0nside-.
r6
y
-veneró como
á
su· padre en Jesu-Christo;
y.
aquel .Señor. que se complace ea derramar los te-
.
\
soros de su misericordia sobre . los humildes, y so-
bre los mayores·
petador.es. verdaderamente a·rre–
pentidos
~
le concedjó el don de los milagros.
Como estaba dotado de una eloqüencia
natu~
ral
.y
pe~suasiva,
empleó sus talentos en convertir
á
los idólatras.
F.ueen !!Sto extraordinariamente
fe...
líz,
y
aument6 tan considerablemente el rebaño de
Jesu-Christo, que desptJes de la muerte de Anthi–
mo, se
a~egura
que todos los Fieles le escogieron
l!lnánimemente por su Pastór ,
y
que fue succes<?r
suyo
en la Sjlla de Atttioquía.
El
que habia sido
fervoroso Christiano ,
y
santo Presbítero, fue des..
pues . modélo de Prelados, reconociendo luego
to–
do su rebaño que tenia en Cipriano tJn nuevo Após..
tol. Impelido .de sl!l humildad , divulgó su confe–
sion;
y
.
esta- confesion en que no disimulaba algu-
na de sus -cu'lpas·,
a11imó
la confianza de los ma–
yores pecapos,
y
contribuyó mucho
á
la eonver.;.
sion de los Infieles.
I
Ha~