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DEVOTOS.
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lo.
De Ja Provin ·a de Anj u pas'
á
la de Nor- Dia XXV.
mandía , donde e parció p r tod s parte
las
lu-
ces de la Fe, haciendo tan prndigio a multitud de
conver iones , que
con razon
e
le
puede apelli-
dar el Apóstol de aquella Provincia , como de mu-
chas otras.
Creciendo
en Fermín
cada
~ia
ma
y
mas
el
fervoroso deseo
de .
derrama~
su sangre por la Fe
de Jesu·Christo; notici0so
de
<iJUe
el Prcsi ente Va..
lerio , enemigo mortal del nombre cñri tiano, per•
seguia
á
los
Fiel~s
en el Beauvé
con
extraordina–
ria crueldad , voló allá apresuradamente , no dudan..
do encontrar con la· suspirada C<Jrona del martirio.
Con efeélo , luego que llegó , fue reconocido por
Christiano;
y
habiendo sido denunciado como tal
en el
Tribunal del Presidente ,.
fue
encerrado
de su
orden en una horrorosa cárcel · ·Pero no bastarda
á
satisfacer. la insaciable sed que tenia de
padecer, ni.i
las incomodidades de la prisio°!ll
4
ni. los tormentos
que le hicieron sufrir
en
ella.
Perseveró
preso
y
.encadenado hasta la muerte
deJ
Presidente Sergio,
succesor de Valerio, con cuya
ocasjon
le
pu ieron
en
libertad
los mismos Ciudadano .
Aprovecban–
dose de ella San
Fermín,
predicó públicamente
la
Fe de Jesu Christo en :Beauvés ,
con
tanta bendi–
cion
y
con tan
felíces
sucesos , que se edificaron
muchas Iglesias. Corrió despues toda la Picardía,
y
una parte de los Países
Baxos ,
con el mi ·mo·
zelo,
y
con igual fruto en tod:is partes ; hast::i
que
en fin
entró en Amiens, teatro destin do por la divina
providencia
para dichoso término de sus apostóli–
cas fatigas..
Lue...