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E X ERel e1o s
Junio. desembatazo que hechiza, es ilusion·,que engaña, re:
lámpago que desvanece. Quanto mas viváz es el in–
genio, es mas superficial
y
menos sólido; su misma pe–
netracion
l~
disipa; quanto .mas brilla , tanto menos
dura. Ni es menos vana la hermosura ; mas
consist~
en la imaginacion que en la ·realidad .; es una flor que
se
marchita ; una
ex~lacion
que el mas
leve s0plo
la apaga; rara hay que no sea postiza, ninguna que
pu~da
funJar un mérito verJadero ;
á
lo mas es una
proporcion de miembros
y
de facciones , que agradl
á
los ojos
y
á
los sentidos, Solamente la virtud puede
y
debe sevir de asunto al elógio de una mugcr res·
petable por sus
pren~as;
qualquiera otq alabanza es
i¡na insulsa lisonja. Veamos ya Ja_alta jdea que .AD>
da' de esto
~l
Espíritu Santo en el
qiagnífi~o
elógio,
que hace de una muger.
El temor de Dios , dice, que es el principio de la
verdadera sabiduría , es como el cimiento de todas
sus b11enas prendas. Teme
á
Dios , y" le ama ; una de
sus principales ocupaciones es el .cuidado de vivir
muy acorde con su marido, y de consen·ar la paz y
la union en la familia; sobre todo, su mayor estudio
es la vigilancia sobre las costumbres de los domi:sticos,
y
la aplicacion á que reyne-en todo, el concierto
y,
el buen orden, Humilde sin afeéhcion , modesta sin'
artificio , aseada.'segun su condlcion , pero sin profa–
nidad, inspira en todos veneracion
á
la virtud; háce–
se
admirar 'por su
cir~unspeccíon
y por sti pruden:
cia
en
todas las palabras ; sin salir de los límites de su
estado arriba
4
una
emin~nte
santidad. Hizo cosas
v~,r-,
daderamente grandes, dice el Espíritu Santo:
Maman
suam misit adfórtia,
¿Pero qué maravilla> fueron
es~
·
tas/