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SA Tt SIMA VIRGEN.' 43 7
:EL milagro era demasiado patc te , no excitar
la devocion pública. Todo el mundo miró esta Iglesia
como un lugar -santo y singularmente privilegiado por
~a eleccion particular que habia hecho de é l la Santisi- .
ma Virgen. Annque yá había en Roma , como . en to–
das partes , Oratorios consagrados a.Dios , y dedicados
a honra de la Santísima Virgen ; con todo, esta fue la
primera Iglesia que en R ma se edificó y dedicó baxo
el titulo especial de la Madre de Dios, cuya ded icacion
celebra la Ig lesia ·el día 5 de Agosto. Era justo que des–
pu~s de la Dedicacion de la lglesia del Salvador, llama;.
da San Juan de Letrán ., se ce ebrase la Dedicac10n de
la Iglesia de Santa Maria la Mayor, comunmente lla...
macla nuestra Señ0ra de las Nieves•
. L A FIESTA DEL SANTO ROSARIO.
, . .
N Adie ignora que el Rosario., compuesto 'de quin–
.ce decenas de granos , l para reza r otras tantas
Ave Marias a honr.a de· la Santjsima Virgen , es una de
las mas santas práélicas· de de.va.don que hay entre los
F ieles. Se sabe qtle al gran Santo D01;ningo, fundador de
la famosa Orden de Predicadores , se le debe este devoto
método de orar, el que enseñó el Santo en conseqüencia de
una aparicion que tuvo de la Santi ima Virgen el año.
I 208 ' mientras que predicaba a los Albigenses , del
qual se sirvió con tanto fruto .para la conversion de estos
heteges. Este gran Santo, en lugar de echar mano, ccr
mo lo babia hecho hasta entonces , de las disputas y
controversias , las quales pueden confundfr a los here–
ges , pero no siempre los conviert n , se ~ p l icó de pues
de esta celestial v:ision s.olamente a predrca r, las gran"7!
de-.