fD
E
V
o
To S.
providencia .en cien
ree~cue~tros
!
Si
pud~er<1. m~s
traer
Día
XXI.
a
la memoria roda la h1íl:ona de nudha infancia,
y
de
la ed d
mas abanzada; Gfu eramos capaces de defen·
volver toda
fa
interior economía, deicubririamos
fin
duda cien pequeños milagros obrados en nueíl:ro
fa.
vor.
Y
quién
fo
acuerda
de
dar graci:is
al
Señor,
y
de
mofharle fü reconocimiento? Algun di:i conoce-
1érnos
de qué confeqLlencia fueron rodos efos bene--
ficios , quando conozcamos el daíio que nos
hizo
nucíl:ra ingratitud
a
ellos. Será
ya
tiempo
de dar
gracias
a
Dios por tantos
favores~
.
Grande lo es fin duda
1<1.
pi'oteccion
del S
ñor er1
los peligros de
la
vida.
Pero
fera meno1·
b que- ex..
plicJ con tama freqüencia
,
librandoro0s cde Jos del al·
ma?
O,
y
con
quanra razon
~ed'c~mos
exc;lam·a.r cori
el
Sabio:
Librafterm:
,
Señ-Or., Jegun
!t~
rnultitu4 de
tti
mifericordia
,
de los
Leones
rügier.;,tes
,
que
cercando...
me
por todas
partes ,
procuraban devorarme.
Si Dios
e.9
nueíl:ro defenfor,
y
nudho proteél:or, quiér: nos po–
drá d.lñan
Una gran confianza en Dios, quandó
es
foíl:enida por upa grande inocencia>
oa
lo menos por–
una
penitencia
COJi1ftame,
y por un
defeo
fincéro.
do
no
ncg:i. r
nada
a
Dios , es una poderofa , es una fuer..
ce trimhen..
El
Sabio tenia, poco masó menos, los mi(..,.
mos enemigos que nofotros,
la
mifina violenda de
p~
..
fiones, los mifmos
falfos
amigos,
las
mifmas injufü,.
cias de parre de los concurremes, la mifn;ia maliguidad
de
los envidiofos ,. los
miíinos
arrificios de 1os rliíimu.,.
lados ,
todos falaces, todos temibles, las m·{m;i.s mor... '
<leduras
de
los
calumniadores,
b
mifina mala
fé,
la
m¡r ..
ma
crueldad,
las
mi~in;i.s
ínjuíl:icias.
En
medio de rod0s..
cll;os peligros> rodeado de rodas 'c!los enemigos , efrá
Yv
~
[~'1