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EXCELENCIAS DE SAN· PEDRO.
de.
la~
mifmas de que hablaba el Señor : porque ni
á
fu Divina
Magd\:ad era congruente confejo el decir, tiempo
es
de guerra,
vended
l~
tunica,
y
comprad un cuchillo para pelear, ni en los
Apoíl:oles,
á
tanto riefgo, era proporcionada defenfa, ni ofen–
[a
dos cuchillos de mefa, ni aun de monte, fino dos efpadas
bue–
nas ,
y
proporcionadas.
7 Tambien puede dudarfe quienes fueron los Apofioles
que digeron :
Aquí eftán dos ejpadas
.?
Y efio no es Íacil de averi -
guar , callandolo todos los Evangeliíl:as ; pero puede colegirCe,
que lo diria alguno de los valientes del Colegio Apofiolico, que
en mi Centimiento eran San Pedro , Santiago ,
y
Santo T
0111é.
San Pedro , porque
[u
fortaleza de animo
Ce
rr1anifiefia
infinita~
veces,
y
lo que .en efio, como en todo excedia á los demás, me .,
jor que todos lo dirá Maleo en
el
1nifmo huerto.
(r)
Santiago,
porque era un rayo de Dios, pues le llamó fu 1'ivina Magefl:ad,
hijo del trueno;
{f)
y
aun defpues de muerto en tantas ,
y
tan
glou;iofas batallas ,
y
viltorias manifieíl:a fu valor, defendiendo–
nos
á
E Eaña. Santo Toi.
é ,
po que quando
1
:s
dos hermanas,
Marta ,
an a enviaron
á
fu licar .al Señor , que vinieífe
á
cu.–
rar
~
fu hermano ,
y
fu Divinél Magefiad fe difpufo
á
ello, le di–
geron lo ifcitJulos:
?Señor, ayer os t¡t}erian matar en Jerufalln;
y
ahora uerei aee-rairos
á
aquella
Ciuda'Zl.
con ·r
a
'.Betania
?
Y
el
Seño refolvió
el
ir ·
y
dice
el
Sagrado Evangelifl:a , que SantG>
,Tomé dijo:
Eamus
W-
nos, ut moriamur cum illo:
(t)
Vamos nofo–
tros,
y
mueramos con el Señor:
en .donde fe conoce llanamente
un animo refuelto , detenninado ,
y
valiente ;
y
aun en el mo–
do del dudar ,
y
no creer en la Reforeccion , no fe manifieíl:a
poco fu condicion refuelta ,
y
determinada , diciendo :
No
lo
creeré
,
fino pongo mis dedos dentro de la mifma llaga;
(u}
y
afsi uno ·
de efros tres , es creíble lo diria ,
y
en duda , fiendo uno de
ellos , es mas verifi1nil que lo digeífe San,.. Pedro , pues fobre
fer mas valerofo, fi e1npre era
el
que por todos hablaba.
8 T ambien hace dudar , ¿por qué digeron que
atli
habia
dos efpadas , quando podían facilmente colegir , 6 que no eran
baftantes para tanta prevenciQn de peligros, como
el
Señor in–
fi-
(r) D. Ambrof. apud Maldon:lt. in Luc.
u. (
f}
Marc. 3• v.
17.
(t)
N,f,tnc
q:t<Rrebant te
Jt~dtei
lapidare
,
&
itemm
l11tdis
il/Nc.
Joan.
t t.
v. 8.
&
I
6.
(u)
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in manibus cju¡ fixuram
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non&rrdam.
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