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EL
HOMBRE
.
-&c. Y siendo asi, que por lo
g~he-
ral son necesarias capacidad,
y
vir–
tlldes para 111antener esto en una fa-
111ilia, concluirénlos tan1bien, que
justan1en'te se conservan con los
,111is1110S
ll1edios , que dieron causa
á
su origen,
y
tendréll10s por cierto,
que degenerará de
él
quien se apar":' "
táre de ellos,
y
á
ll1as de su proprio
,daño podré,luos decir, que
oc~siona
-una grave injusticia
á
la
cal~sa
públi...
ca. 'Pues si la estünacion, que, en
ella .esta establecida, se
dá
á
la No–
bleza " privilegiandola tan
justanlen~
te sobre los den1ás h0111bres, '
ha
procedido,
COIUO
queda visto, de
-reconocüniento de estos
á
las Ylrtu–
¿es relevantes de
, algul1o~,
que sin
duda fuéron benelueriros de la cau–
sa pública. Parece cierto, que
C01UO
su 111erito fué finito, tambien lo
de–
bería ser
el
ternlino, que se conce–
die~e
á
_sus,
succe,spres
par'1. ,
go~ar
de
•
,,1
él;