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.Los labradores
S. MARCOS
12
malvados
guno, pat a que vuestro Padre que
. 5 Y volvió á enviar otro, y á aquél
está en los cielos os perdone tam-
mataron; y á otros muchos, hirien-
bién á vosotros vuestras ofensas.
do á unos y' matando á otros. • ·
26 Porque ªsi vosotros no perdo-
b
~g. ~-
g.
6 Teniendo pues aún un hijo bsuyo
nareis, tampoco vuestro Padre que
'· · · amado, enviólo también á ellos el
, está en los cielos os perdonará
postrero, diciendo: Tendrán en re-
vuestras ofensas.
verencia á mi hijo.
7 Mas aquellos labradores dijeron
27 Y volvieron á Jerusalem;
cy
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2
~1.
entre sí: Este es el heredero;
andando él por el templo, vienen á
Lc.2ú-s.
venid, matémosle, y la heredad
él los príncipes de los sacerdotes,
s'erá nuestra.
y los escribas, y los ancianos;
8 Y prendiéndole, le mataron, y
28 Y le dicen: ¿Con qué facultad
echaron fuera de la viña.
haces estas cosas? ¿y quién te ha
9 ¿Qué, pues, hará el señor de la
dado esta facultad para hacer estas
viña? Vendrá, y destruirá á es-
cosas?
1
tos labradores, y dará su viña á
29 Y Jesús respondiendo en-
otros.
tonces, les dice: Os preguntaré
10
¿Ni aun esta Escritura habéis
también yo una palabra; y respon-
leído:
dedme, y os diré con qué facultad
d
sa1. 111s.
dLa piedra que desecharon los
hago estas cosas:
22
•
23
!
que edificaban,
30 El bautismo de Juan, ¿era del
Esta es puesta por cabeza de
~ cielo,
ó de los hombres? Respon-
esquina;
dedme.
11 Por el Señor es hecho esto,
31
Entonces ellos pensaron den-
Y es cosa maravillosa en nues-
tro de sí, diciendo: Si dijéremos,
tros ojos?
del cielo, dirá: ¿Por qué,
p~es,
no1•
op
11 · 18.
12
Y procuraban prenderle, ' por-
le creísteis?
que entendían que deoía á ellos
32 Y si dij éremos, de los h om..
aquella par ábola; mas temian
á
la
,,bres, tememos al pueblo: porque1
multitud; y dejándole, se fueron .
· todos juzgal:Jan de Juan, que ver-
daderamente erJ!' profeta.
r.u:1,22.
33 Y respondiendo, dicen á Jesús:
i~-:4~ó.
No sabemos. Entonces respon-
20-as.
diendo Jesús, les di ce: Tampoco yo
os diré con qué facultad hago 'estas
cosas.
CAPITULO
12
Y
COMENZÓ •á hablarles por
o•Mt.
21.
parábolas: Plantó-un hombre
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0
'
una viña, y la cercó con seto, y
9--Í9. ·
cavó un lagar, y edificó una torre,
y la arrendó
á
labradores, y se.
partió lejos.
1.in,s.
e.
2 Y envió un siervo á los labra–
dores, al tiempo, para que tomase
de los labradores del fruto de la
viña.
3 Mas ellos, tomándole, le hirie–
ron, y le enviaron vacío.
4 Y volvió á enviarles otro siervo;
mas apedreándole, le hirieron en
la cabeza,
y
volvieron á enviarle
afrentado.
56
13
Y ' envían á él algunos de los
Fariseos
y
de los Herodianos, para
que le sorprendiesen en
alguna
palabra.
.
14
Y viniendo ellos, le dieen:
Maestro, sabemos que eres hom–
bre de verdad, y
que
no te cuidas
de nadie; porque no miras á la
apariencia de hombres, antes con
verdad enseñas el camíno de Dios:
¿Es Ucito dar tributo
á
César, ó
no? ¿Daremos, ó no daremos?
15 Entonces él, como entendía la
hipocresía de ellos, les dijo: "¿Por
qué me tentáis? Traedme la mo–
neda para que la vea.
16
Y ellos se la trajeron, y les
dice: ¿Cúya es esta imagen y esta
inscripción? Y
ello~
le dijeron: De
César.
17 Y respondiendo Jesús, les dijo:
Dad lo que es de César á César; y
lo que es de Dios, á Dios. Y se
maravillaron de ello.