-;- 7-
l
aanto en el mundo. A
Í<is
cuales no habrá hom–
bre de sano criterio, que no les diga, con .Ri–
chelieu: "Vosotros creeis perjudicar á los
J
e–
~~mitas,
y
tra~ajais
admirablemente en su favor :
por cuanto no·habrá quien desconozca cuánta.
gloria. cabe en ser atacados por la misma boca
que acusa á la Iglesia, calumnia á los Santos
é
injuria
á
Jesucristo".
Pero, aunque esto sería
ba~tante
para su con-
:fusion, no lo es para lograr los fines que nos
proponemos conseguir;
y
por
e~o
nosotros que,
somos hijos fieles de la Iglesia,
y
que
bendui–
eimos
lo que ella
bendioe,
y
que, por consiguien–
te,
veneramos en la Compañía de Jesús, - una
de las Ordenes religiosa.r.a más respetables, cu–
yos miembros, segun la bella
1r~se
<Je Pio VII
ayudan al Vieario de Cristo c9mo . robustos y
experimentados remeros,
á
romper la furia
......1le las olas, que
á
cada instante amenazan ha–
cer zozobrar la navecilla de San Pedro, vamos
á
presentar los innegables títulos que tiene
á
· la veneracion
y
gratitud de las almas cristia-
nas,
y
á
deshacer las calumnias de más bulto,
/
con que tratan de enlodada
y
de eclipsar su
belleza las que no
~o
son. Y nos concretamos–
.sólo
á
las calumnias de más bulto, porque, si .
nos propusiéramos destruir todas las que
~u~--r/~
...
.
.
~