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I 20
VIDA DE. CHRISTO
presamente, que sin la
fé
·nada comprehenaerfan de su
dottrina. Diceles, pues, aquí que el Misterio de la Eu–
caristía
q~
.les promete instituir , es tan sobre los senti–
dos
y
sobre toda humana razon, que solo lo podrán com..1
prehender los que no se abstienen en resistir
a
'las impre...:
siones
de.lagracia, los que sean dóciles,
y
no cierren los
ojos
a
Jas luces de
la
fé,
t
Ignorais,les
dixo~que
está
es~
crito en los Profetas,que será·n todos discípulos del
mis–
mo Dios, que serán todos dóciles
a
la voz de
Dios~
Et
erunt omnes docíbiles Dei. (a)
En
la
escuela de Dios se
necesita de docilidad , se necesita tener una fé sencilla,
humílde
y
sumisa ; sin estafé no
hay
sino ceguedad-, er–
ror ., muerte en esta vida
y
despues de ella.
Vosotros me decís , que vuestros Padres comieron
el maná en el desierto ; es verdad, pero no por eso de–
xaron de morir -; aquel maná no pudo , ni preservarlos
de la muerte temporal , ni alcanzarles la vida eterna:
no hay otro que Yo, que pueda preservar-de la muerte;
porque Yo soy el pan de vida : Yo daré
a
}c;>s que cre-–
yeren en mí la vida del alma , que será una prenda se–
gura de la resufreccion bienaventurada,
y
de
la
inmor–
talidad de sus cuerpos. Este es propriamente el solo pan
bax·ado del Cielo, para que si alguno
comier~
de él con
las disposieiones necesarias,
nó
muera con la ·muerte
del alma: este Divino pan de que os hablo , será para
los buenos, esto es , para los que animados de una
fé
viva
lo
comieren en estado de gracia, una prenda segu–
ra,
y
como las arra& de una vida bienaventurada
y
eter..
na;
será
asimismo para los malos que no tuvieren_
fé,
Q
que teniendola , lo comieren en estado de pecado mor–
tal '
uña
prenda de su etern'J, condenacion. .
§,XXIX.
(a)
Joánn.
6.