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EXBRCICIOS
LA .A:scEN•
qu!ntur novis
~
.rerplntes tol!ent
;
&
si mortiferum
sroN.
quid híherint, non eis nocfhit; super cegr(js manus
impónent,
&
bene hahéhunt. Et Dóminus quidem
Je.rus, postqmlm tocúws est eis
,
assúmptus est
ita
c.etrem,
&
sedet
a
dextris Dei.
llli
autem proféf1i,
pradicavérunt ublque, Dómino cooperánte
,
&
ser–
mónem confirmánte, sequéntibus signis.
MEDITACION
SOBRE EL
MlSTERf(j
DEL DIA.
. PUNTO PRIMERO.
C
Onsidera,que jamás hubo ni puede haber triun–
fo
mas pompóso, mas glorioso, mas magní.i.
fiico, ni mas .augusto que el del Salvador del mundc¡
en su Ascension al Cielo. Por la palabra triunfo se
entiende una ceremonia
ó
solemnidad , decretada
para honrar
á
un General viél:orioso, que hace en–
trada en la Capital con ei mayor aparato y magnifi–
cencia. En los
triunfo~.
el triunfador 'iba ·en una car–
roza córonado de laurél., precedido del Senado, en–
tre las aclamaciones de una infinidad de Ciudadanos
que ·rodeaban al triunfador, publicando sus viél:orias;
á
esto se reduda la famosa fiesta que se hacía en
honra del con<¡uistador, la qual era siempre obscu–
recida por las lágrimas de lo's Reyes cautivos, que _
iban junto
á
la carroza cargados de cadenas , y que
con sus gemidos interrumpian los gritos de alegría
y
las aclamaciones del pueblo. Imagen
imperfeéh,
idea ciertamente indigna del triunfo de Jesu-Chris..
..:
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