tieron· acremente la" doctrinas filosóficas
de Hu–
mc, rio püdieron resistirá su influencia. Entre
'ellas, ocupa un lug;:ifpreferente la escuela psi–
-col ógica Escocesa . . Esta . €scuela sig-nifica un.a
:conciliación entre
el
idealismo
y
el sensualisr110,
:entre ampos )' la filosofía ' Kantiana;
y
además
·la . transición
á
la psic:ohgía experimental de
!J10y.
- ~ajo
el p,rimer aspecto,
á
la vez que admi–
-te, con
lo~ s·e·n· su á list~s
y
con Hmne, que todos
·Jos cono"cimientos provienen del mundo sensi:.
-ble,
y
que no nos es dado akanzar los problemas
-iTi-etafísicos ontológicos; sostiene, con los idea·-
·listas,
-que
sobre la materia existe en nuestra
naturaleza un principio inteligente, q·ue puede
·ser observado,
y
constituida base de una cien–
·c!a, siguiendo el método socr{1tico proclamado
'por Descartes. Rijo el segundo,
Ll
escuela es·
cocesa da
á
nuestras ideas sólo un criterio sub–
·jetivo
y
un valor fenomenal
y
relativo, que pre-
lu d ia la críti.::a de Kant. Bajo el tercero, cori–
·secuente con
Sll
norma de no estudiar Jos pro–
·Ql emas trascendentales del alma, an;-iliza escru-–
pulosamente ttn gran núlllero de fenómenos de
· nuestrq espíritu; principalmente de l::l sensibi–
.Ji dad, sobre la que produce
J.a
escuela un esti.1-
dio m<1gistral, c:on motiv·o ele la refutación de las
' teorías ele Locke. Tan importantes son las ob–
·servaciones
y
ariá!isis psicológicos
d~
la escue–
·ia
escocesa,
qi.reella podría ser aceptada como
· uno· · de los r<" presentantes más genuinos
y
·p·rinéipa·les de
la
ci-enci.<\ psicológica de hoy; .si
: su ;:erit<-'rio introspectivo no fuera
·et.eltocio in-
completo; y
~¡
su procedimiento, fundado en las
- verdades ..de· sm;tido- común,.
.np Juera,
también,