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ten ía,
y
promovió un mov.imiento
intel ectual
tan vasto como
profunclo.ii (
1)
Se ría éste suficiente me recimi e nto para que
disculpásemos los e rrores que han ciado ra
triste fin
á
la esc ue la ca rtesia na como
~; istem a
filo.só.fico; s i.sobre é l, no se
l eva nt~ra
aun, ava–
sallador,
la
libe rtad de l pensamiento
y
la reglas
del método g randioso, qu e obligan
á
la crítica,
por más intransigente que ell a sea, á inclinar–
se respetuosa a nte e l ge nio d e D escartes .
Según lo que se ha indicado, los dos padres
<le la filosofía mod e rn a, Bacón
y
Descartes, at:n–
que movidos por una misma neces idad , gt\iados
por un mismo impul so,
y
come nza ndo sus tra–
bajos por una misma dirección; ha:1 l! egcldo al
té rmino de su obra, completamente divorciados;
presentándose, cada cual al otro, como te rribl e
rival. Bacón funda una escuela pres tigiosa, qu e,
df!sarrollando bs t eorías del ma es tro , se e ntre–
ga resuelta e n brazos de l se11sL:alismo. La de
Descartes,
,á
su vez, defendida por insignes
filósofos,
saca
todas hs consécuencias que
conte ní a
la doctrina ele
su jefe;
y
se e ngol –
fa,
progr~sivamente,
e n los delirios de l idea–
li smo. La hi s to ria
el e
la
filo so fía se divide,
pues, e n dos ca mpos; has ta q•.1 e la humanidad.
e n nomb re de un a ciencia m:ls elevadél, ma nda
á un he raldo para que a nuncie
á
a mbos ej é rci –
tos que defienden una causa inso s tenibl e; ha–
cie ndo que
respectivam~nte
.rindan sus armas,
(1)
Manuel d e Ja Revilla: Introd uc. á
Ja
traduc . españp–
Ja de
las
obras ·de Desea rtes.